Bordes
Asistimos mediante la improvisación al encuentro del sujeto. “Sujetas” que visibilizan la situación de la mujer, en tanto inesencial, en tanto otro, definida en función de un discurso ajeno, pasivamente aceptado. Los bordes de la subjetividad femenina se hallan mas allá de ese agujero, no existiendo parámetro para marcar un punto o una línea que pueda definirla, dando lugar a que el sujeto construya y defina su propia voz, expresión y manera, no como un discurso estático sino como la posibilidad de reconstruirse libremente cada vez.. También están aquí las líneas que llevan al sujeto a buscarse, a rebelarse a oponerse. Es la rebelión de la mujer en el ejercicio de esta forma de concebirse lo otro. Los personajes entran en tensión con la limitación social. Saliendo de los límites de agujero que no las contiene y buscando los bordes. La violencia y el enojo de esa reducción es provocadora. Se elabora un discurso a través del cuerpo , para ser leído e interpretado por el espectador multidireccionalmente. Esos cuerpos esbozan y emergen en lo inmediato de la acción de componer pretendiendo materializar la norma dentro de la norma, un mandato simbó